Los problemas de la vida cotidiana y el estrés que se vive a diario, provocan un impacto directo en nuestra salud. Morderse las uñas, tiene serias implicaciones, no sólo desde el punto de vista estético, ya que las uñas transportan virus y bacterias que pueden hacerte enfermar al entrar en contacto con la boca. Este hábito compulsivo puede dañar permanentemente tus uñas, dientes e incluso encías.
Te damos algunos trucos para dejar de hacerlo paulatinamente:
ESMALTES CON SABORES AMARGOS
Éstos se venden en las farmacias sin prescripción, son seguros y vienen con un aplicador especial para que su uso sea más fácil.
MANTÉN TUS UÑAS CORTAS
Si tienes menos uña para morder, tendrás menos tentación de hacerlo.
REEMPLAZARLO POR OTRO HÁBITO
Intenta reemplazar el hábito por otro más saludable que ejercite tus manos y las mantenga ocupadas, por ejemplo una pelota antiestrés.
MASTICA CHICLES
Si mantienes la boca ocupada masticando chicles sin azúcar sentirás menos tiempo el deseo incontrolable de morderte las uñas.
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